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Cuadernos del Sur. Historia

versión On-line ISSN 2362-2997

Cuad. Sur, Hist.  no.35-36 Bahía Blanca  2007

 

La tragedia germánica. Alemania en dos y los avatares de la RDA

Jorge P. Sgrazzutti*

* UNR - Centro de Estudios de Historia Europea - CEHE. E-mail:jsgrazzu@yahoo.com

Resumen
La división de Alemania en dos durante la Guerra Fría, significó un aliento para construir una sociedad más avanzada, democrática o igualitaria, en ambas partes, en una relación de competencia, mostrando la superioridad de sus modelos a sus habitantes, incluso representándose como la auténtica Alemania al resto del mundo.
En esta lógica, se produce la construcción del socialismo en la RDA. Su desarrollo estará condicionado tanto por la pertenencia al bloque soviético, como por el capitalismo de su homónimo occidental. Por ello, los dirigentes comunistas buscarán crear mejores condiciones sociales a través de programas destinados a todos los sectores, que tenderán a ampliarse a lo largo de su existencia como estado, presentando a su régimen como un modelo de sociedad avanzada.
La construcción de los valores socialistas queda reflejada en los diversos fascículos de divulgación, donde se analizan las formas en que la cobertura social, la protección, el desarrollo científico, cultural y deportivo generan un proyecto social que no ha sido aún suficientemente analizado en el mundo de habla hispana. Se reflexionará sobre estos proyectos para visualizar el papel del estado en la construcción de un orden social, buscando sentar las bases de su legitimación.

Palabras clave: Guerra fría; socialismo real; legitimación; disidencia.

Abstract
The partition of Germany during the Cold War, meant a encouragement to construct a more advanced, democratic or egalitarian society in both parts, in a competition relationship, showing the superiority of its models to its inhabitants, even representing itself like the authentic Germany to the rest of the world.
The construction of socialism in the RDA takes place in this logic. Its development will be conditioned by belonging to the Soviet block, and by the Capitalism of its western homonym. Hence, the communist leaders will look forward to create better social conditions through programs set aside to all sectors, wich will tend to extend themselves throughout their existence as state, presenting their regime like a advanced society model.
The construction of the socialist values is reflected in diverse popular books, where are analyzed the forms in wich social covering, protection and  scientific, cultural and sport development generates a social project that has not been still sufficiently analyzed in the Hispanic world. We will deliberate on these projects to visualize the role of the state in the construction of a social order, in order to lay the foundations of his legitimation.

Keywords: Cold war; real socialism; legitimation; disidence.

Recibido 31/03/06
Aceptado para su publicación03/04/07

"El 7 de octubre de 1949 las fuerzas patrióticas de Alemania fundaron, bajo la dirección de la clase obrera y en virtud del derecho de autodeterminación del pueblo alemán, la República Democrática Alemana, único Estado alemán legítimo, como respuesta a la traición nacional de los circuitos dominantes de Alemania occidental."1.

Los líderes han perdido la confianza del pueblo. ¿No sería más simple disolver el pueblo y elegir otro? Bertolt Brecht, junio de 1953.

Cuando me propuse realizar este artículo, encontré ciertos obstáculos. La mayoría de las fuentes -oficiales, de divulgación y de viajeros por la RDA- brindaban una mirada idílica sobre la construcción del socialismo. Para contrarrestarla, empecé a rastrear testimonios que visualizaran los conflictos, las protestas, la oposición y disidencia en este estado socialista. Me sorprendió notar la dificultad para distinguir estos fenómenos, ya que la propaganda oficial los envolvía en una única práctica de tipo conspirativa, denominándolos grosso modo "política del imperialismo militarista alemán occidental y norteamericano".

Las visiones occidentales, mayoritariamente escritos periodísticos, indicaban que la opresión del estado totalitario, provocaba la confrontación total de la población contra éste, lo cual tampoco permitía diferenciar los procesos. En términos más académicos, dicha producción no historizaba las protestas, quedando sin clasificar y presentadas como partes de un conflicto solapado a lo largo del tiempo, hasta que la caída del Muro "demostró" la "validez" de sus análisis. Este enfoque autocomplaciente me llevó a continuar la búsqueda para abordar el tema más seriamente.

Entonces recurrí a los libros de historia2, elaborados después de la desintegración del bloque comunista. Encontré que los enfoques liberal-democráticos, ni siquiera realizaron una puesta en cuestión tanto de los procesos sociales como de los disidentes de Alemania oriental: Robert Havemann, Rudolf Bahro, Wolfgang Harich; ni tampoco sobre los escritores y músicos populares, que protestaron contra la censura, clamando la libre expresión de ideas y proyectos alternativos, ¿no valía la pena relevar la actitud de estas expresiones?

Ante esta creciente insatisfacción, decidí navegar por internet. Recordaba que páginas anarquistas y trotskistas brindaban información de las protestas en el bloque comunista, clasificadas por huelgas, organizaciones de consejos obreros y levantamientos. El material encontrado sobre la revuelta de 1953 se resumía en una página anarquista, o en algunas reflexiones acerca de la forma en que se desarrollaban las dictaduras comunistas. El hermetismo interior, la negativa de los alemanes occidentales y la escasa repercusión (la dificultad para un análisis que superara la instancia política inmediata) en las organizaciones de izquierda, pueden explicar que la información sobre la oposición sea muy escueta, dificultando un análisis exhaustivo. Sin embargo, se pueden comprender mejor los procesos, con las apreciaciones de historiadores provenientes de la región, de disidentes reconocidos o de los que fueron autorizados a emigrar, por brindar una información de primera mano, como sujetos activos en dichos procesos3.

Con esta documentación podré apreciar que esa oposición pretendió construir una sociedad más justa, aunque será una visión fragmentada, porque la información disponible muestra algunos aspectos relativos a la disidencia. Visualizar este problema historiográfico fue necesario a los fines de marcar los inconvenientes para reflexionar sobre la historia de la RDA.

El enfoque a utilizar, se centra en las formas de vida, en las vivencias personales y lo cotidiano4, alejándome de interpretaciones basadas en la confrontación ideológica, cargadas de prejuicios típicos de épocas donde la lucha era bien candente, que dificultaron aproximaciones más realistas. Lamentablemente, a diferencia de la URSS donde algunos intelectuales fueron editados (Strumilin), la RDA no tradujo al castellano los aportes de científicos que reflexionaron, con ciertos márgenes de libertad, sobre temas que pudieron tener un atractivo en la construcción del "socialismo avanzado", más allá del adoctrinamiento político.

Asimismo la pretensión está centrada en el intento de la RDA por confrontar con la otra Alemania en todos los planos posibles. Su legitimidad se basó en la construcción de una imagen inversa a la de los valores desarrollados en la RFA, que las potencias vencedoras del nazismo, crearon para contrarrestar el supuesto avance de la URSS hacia Europa. Si la parte occidental creó instituciones liberal-democráticas, la parte oriental construyó su imagen democrática basada en un Frente de fuerzas que representaba los "intereses más avanzados y progresistas" de una Alemania antifascista. Percibir esta problemática y cotejarla con los materiales, será fundamental para el presente trabajo.

La lucha por la representación de la historia (progresista) de Alemania, la construcción de un sistema social más justo y los obstáculos para su realización deben ser tenidos en cuenta a la hora de visualizar las críticas de aquellos ciudadanos que decidieron cuestionar el modelo, manteniendo firmes sus convicciones de un mundo más avanzado y en armonía con los ideales de un socialismo democrático.

Una periodización tentativa

Ante todo conviene realizar una periodización para señalar las diferentes etapas de la historia alemana oriental. Contextualizando sus problemas, la exposición podrá resultar más clara y comprensible. En la construcción histórica de la RDA los componentes externos jugaron un papel fundamental en los acontecimientos, en los proyectos y en las estructuras económicas, sociales y políticas, que la condicionaron hasta el momento de su desaparición con la caída del Muro, integrándose a la Alemania capitalista.

Con la derrota del Tercer Reich, los aliados -Unión Soviética, Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia- emprendieron medidas conjuntas, continuando el espíritu de colaboración de la época de guerra. Sin embargo éste se fue perdiendo por las confrontaciones que dieron inicio a la Guerra Fría en el escenario mundial, en 1948. Consecuencia de la misma, la demarcación de dos zonas generó la creación de la República Democrática Alemana. Su duración (1949-1989), le da una entidad para estudiarla de manera independiente, sin suponer que la historia alemana, después de la unificación, tuvo un largo paréntesis. A mí entender, los cortes temporales deben ser los siguientes: Una primera etapa: 1949-1953, de conformación del régimen según las pautas impuestas por el stalinismo5, conocida como acumulación primitiva socialista.

Un segundo período arrancó, tras la muerte de Stalin, con el levantamiento en junio de 1953. Si bien fue reprimido, produjo cambios que disminuyeron la presión sobre la población y mejoraron la situación social. Culminó en 1961 con la construcción del muro de Berlín. El influjo del kruschevismo se percibió en la elaboración de planes y propuestas, con la política de la "coexistencia pacífica", como relevan las fuentes oficiales.

Una tercera etapa: desde la elaboración del Nuevo Sistema Económico en 1963 hasta 1971/72, con el reconocimiento internacional como estado soberano y el reemplazo de Ulbricht por Honecker en el poder. Se promovió la descentralización y un incremento de la industria de consumo, para evitar que la Primavera de Praga se convirtiera en un modelo a seguir, ya que su proyecto de "socialismo con rostro humano", significó un peligro para el mantenimiento de la estructura política autoritaria.

El cuarto período: de 1973 a 1981, los problemas de la crisis mundial, el freno de la descentralización económica y el peligro de contagio de la experiencia polaca6, sumados a los reclamos por los derechos humanos, el pacifismo y la degradación ecológica, encuadraron una década difícil desde el punto de vista político. Desde los años 60 hasta mediados de los 80, la versión oficial denominó a ambos períodos "camino a la sociedad socialista avanzada" y "edificación ulterior de la sociedad socialista avanzada"7.

La última etapa comenzó en 1982, cuando se profundizó la crisis por la dependencia financiera a organismos internacionales, extendida hasta 1989 con la caída del Muro y la absorción por la República Federal de Alemania. La llegada de Gorbachov al poder en la Unión Soviética, generó grandes cambios, que amenazaron las convicciones de la dirigencia de la RDA, resistiéndose a implantar las ideas de la perestroika en su país. La caída del muro produjo la unificación alemana ante el desconcierto de todo el mundo. Las condiciones fueron diferentes a las soñadas por los disidentes, quienes imaginaban la unificación con el triunfo de una revolución que amalgamara a todos bajo las banderas del socialismo8.

De estos cuarenta años de historia, deben tomarse en consideración ciertos acontecimientos que marcaron la vida de los alemanes, dejando huellas imborrables. Estos acontecimientos articularán parte de los problemas a analizar, convirtiéndose en ejes necesarios para comprender los procesos. La aceptación de ciertas políticas, la crítica hacia la implementación del socialismo, el poder que la policía política ejerció sobre la sociedad y las marcas que dejó, servirán para apreciar la negativa de los ciudadanos a continuar viviendo de la manera en que lo hacían, cuando comprendieron que no serían reprimidos, para mantener un gobierno que se distanciaba de ellos.

Se pueden señalar como fenómenos traumáticos el levantamiento popular (obrero-campesino) del 17 de junio de 1953, la construcción del Muro de Berlín para evitar la huída en masa de la población y la represión, persecución, control y expulsión de la disidencia científica, artística e intelectual por la policía política (Stasi). Con estos procesos como marco general de relaciones conflictivas, pueden pensarse las propuestas de los dirigentes del SED para buscar la adhesión de los ciudadanos al socialismo, cuyos mecanismos integradores en la lógica régimen protector / sociedad civil, pasaban por lo económico, social, cultural y deportivo.

Por más represiva que fuera la vida bajo la vigilancia del partido, hubo adhesiones voluntarias y el convencimiento de estar construyendo el socialismo en la patria alemana por amplios sectores sociales. Incluso los disidentes, trataron de consolidar el socialismo bajo los preceptos de libertad e igualdad. Lo cual significó que muchos ciudadanos defendieron los valores que aquel había establecido. Solamente los abandonaron al sentirse engañados, por el fracaso de una política que proclamaba al socialismo como superior al capitalismo alemán. El peor de los engaños fue manipulado desde el poder, al desangrarse en una competencia con la otra Alemania, utilizando los medios (técnicos y financieros) que ésta le brindó para producir bienes de manera similar9.

Otras instancias que produjeron la adhesión, fueron los tratados firmados con la Unión Soviética en los años '50 y con Alemania Occidental en 1971, instrumentos que permitieron sentar las bases para una entidad propia y el reconocimiento internacional como estado independiente, es decir soberano.

La delimitación de los procesos desencadenados y los acontecimientos mencionados constituyeron el telón de fondo en la construcción del socialismo alemán. Su dificultad radicó en la división territorial, en la soberanía dual y en una capital dividida por un muro que produjo justificaciones de uno y otro lado.

Los acontecimientos traumáticos y sus justificaciones

En la fase inicial del socialismo en la RDA, que Robert Havemann llamó acumulación primitiva socialista, las condiciones de vida de la población fueron dificultosas, porque los esfuerzos en la reconstrucción económica implicaron jornadas agotadoras. La política de indemnizaciones hacia la Unión Soviética significó reducir al máximo todo aquello que pudiera servir para crear las relaciones socialistas de producción. Las posibilidades de establecer vinculaciones libres y solidarias se vieron recortadas porque el socialismo había comenzado a desarrollarse en la parte minoritaria del territorio alemán, lo cual implicaba competir necesariamente con el capitalismo de la parte mayoritaria del territorio. Por estos motivos, los primeros años fueron duros para la población, al imponérsele sacrificios para lograrlo.

Con la muerte de Stalin, la situación cambió y el futuro fue imaginado de manera diferente. El socialismo continuaba siendo de escasez y la población, acompañando las críticas presentes en las discusiones del partido, deseaba arribar a una nueva etapa política. La sucesión de Stalin señalaba el cambio que también seguiría la RDA. Ni siquiera el severo Walter Ulbricht era un stalinista en su totalidad, rechazó el culto a la personalidad y avanzó en una línea propicia hacia reformas económicas10, buscando resquicios para conseguir mayor autonomía de la RDA.

Sin embargo las disputas en el PCUS, entre Malenkov, Beria, Molotov y Kruschev supusieron una alineación con algunos de estos dirigentes, cuando los enfoques revisionistas desenmascararon las formas violentas e irracionales en que se construyó el socialismo. Abandonar la aberración stalinista del predominio de la industrialización pesada en desmedro de la industria de consumo, mejorar la producción de alimentos y establecer un intercambio más equitativo entre campo y ciudad, fueron los fundamentos para salvar esta primera etapa de la historia socialista.

Las críticas que intelectuales y dirigentes realizaron, alentaron la participación y reclamos de los sectores laborales (rurales y urbanos) para terminar con los sacrificios impuestos. Para desgracia del SED, los soviéticos decidieron recortar los aportes y esto llevó a que los dirigentes pretendieran mejorar la productividad laboral y variar los precios de la canasta familiar, haciendo recaer nuevamente el costo sobre los trabajadores. El resultado fue el levantamiento de Berlín oriental y otras ciudades, protestando contra esta nueva política. Lo que comenzó siendo reclamos económicos, se transformó en proclamas políticas contra los dirigentes del partido y la Stasi. De esta manera, el 17 de junio de 1953, fue el día más radical de los acontecimientos de junio11. Muchos manifestantes sintieron mayor furia, cuando la justificación de la represión realizada por el SED, indicó que las fuerzas fascistas comandadas desde Bonn eran las responsables del levantamiento. Este comentario fue desmentido desde Moscú, aconsejándole al partido "hermano" que abandonara dicha afirmación. En medio de este conflicto nacional se cargó la responsabilidad a los dirigentes "revisionistas" Zaisser, Herrnstadt, Schirdewan, entre otros12.

Según Heller y Feher, Beria podría haber negociado la desaparición de la RDA con los Estados Unidos, aceptando su unificación a cambio de algunas concesiones. De ser cierto tal comentario, puede explicarse por qué Ulbricht pudo maniobrar relativamente bien la crisis de 1953, expulsando del partido a los protegidos de Beria, una vez que éste cayó en desgracia13.

Si la resolución del conflicto favoreció la continuidad de Ulbricht al frente del partido, el levantamiento provocó cambios en la economía y eliminó las consecuencias más aberrantes del stalinismo14, aflojó la presión a los sectores populares y finalizaron las indemnizaciones hacia la URSS. Así, un acto violento desencadenó un cimbronazo en la organización social, comenzando una nueva etapa.

Como contrapartida generó el fortalecimiento de una estructura policial, que vigilaba los movimientos de ciudadanos, científicos sociales y dirigentes del partido, quienes discreparon con la continuidad de Ulbricht al frente del estado. En ese momento los disidentes, aparecieron entre las disputas de las fracciones reformistas y conservadoras luego del XX congreso del PCUS, en 1956. Desenmascarar a Stalin, provocó una ola de "frescura" en las concepciones sociales, pero quienes llevaron adelante el proceso, habían pertenecido al grupo stalinista y no tenían muy en claro cómo avanzar con las reformas.

A posteriori, los intentos de las repúblicas populares por abandonar las restricciones que el modelo stalinista impuso, significaron un llamado de alerta para los dirigentes concientes de la necesidad del cambio social. Estaban temerosos de que abiertas las puertas de las reformas, terminaran arrasando todo aquello que habían aprendido lo que era socialismo, en la práctica y con el andamiaje ideológico del partido. Pero la situación en la RDA era más problemática todavía, porque debía competir con la otra Alemania, que relucía a los ojos de una población pauperizada por la construcción de ese socialismo.

En los años siguientes mejoró el nivel de vida, desapareció el fantasma de la pobreza extrema y se fortaleció la confianza de los ciudadanos en que el socialismo de la RDA procuraba beneficios para todo el pueblo alemán. Los finales de los '50 significaron entrar en una nueva etapa donde el socialismo estaba más consolidado, a pesar del retraso con relación a la RFA.

El comienzo de la revolución científico-técnica auguró un porvenir más integrado, donde la ciencia y la producción marcharían juntas en la construcción de un socialismo superador del capitalismo. La falta de libertad impulsó a muchos orientales a marcharse hacia Berlín occidental y parecía que se iba a producir una sangría humana, un flujo constante de seres humanos, ciudadanos educados en la RDA que no podían vivir bajo este socialismo vigilante. La "fuga de cerebros", alertó a las autoridades por la situación social, quienes decidieron tomar medidas para frenar esta migración, que arruinaba los planes de competir con el mundo capitalista. La "brillante" solución fue la construcción del Muro.

Nuevamente un componente externo se inmiscuía en los asuntos internos de esta Alemania para provocar una reacción que concitó la atención del mundo. La construcción del Muro significó una forma particular de ejercer la soberanía, como pueden desprenderse de las palabras apropiadas por el partido para defender el socialismo: "Era pues necesario garantizar las fronteras de la RDA y construir una muralla antifascista en ellas y en los límites con los sectores occidentales de Berlín con el fin de asegurar la paz para la nación alemana y los pueblos de Europa, así como la construcción socialista en la República Democrática Alemana y la protección de los demás países socialistas"15.

No sólo que la obra fue un triunfo para el socialismo alemán, sino un baluarte que se extendía más allá de las fronteras orientales, convirtiéndose en "casamata" (Gramsci dixit) protectora del bloque en su conjunto. Qué fuerza de expresión y carga ling üística en que un minúsculo país puso sobre sus hombros la responsabilidad de custodio en la construcción de la sociedad soviética.

Pero algo más mundano, para el consumo de los varones adultos en el mundo capitalista, como publicaciones que circulaban con cierta libertad, pudo ser interpretado como un mecanismo de penetración ideológica occidental y de corrupción para la mente de los alemanes orientales. Me refiero a la publicidad de Strip-tease de la cultura occidental para incitar a los soldados populares a desertar "Colocan revistas pornográficas (sobre el muro). Esto último es un método predilecto"16. De todas maneras el argumento esgrimido por el autor, no parece muy convincente a la hora de evaluar la influencia que pudiera desarrollar.

Sobre el Muro hay mucho escrito, libros de política internacional, de historia, el juicio de la Comisión Internacional de Juristas17, literatura de espionaje, otra más intimista e incluso grafittis y expresiones artísticas, lo cual haría de este apartado un volumen inmenso. Alcanza con visitar las páginas de internet, porque los recordatorios han hecho circular imágenes, e historias para mantener la memoria viva y decirle al mundo que los muros no protegen, sino oprimen18.

La opinión de un escritor sobre el impacto que el muro tuvo en la vida de la gente y en su experiencia propia, permite visualizarlo como un problema, para las relaciones cotidianas: "Al construirse el muro, la RDA renunció a proporcionar EL modelo socialista para toda Alemania. También, en otro orden de cosas, casi todos los lemas políticos degeneraron hasta convertirse, en la práctica, en su absurdo desfavorable. El muro no redujo los problemas de la Alemania del Este (sólo en la economía y durante un breve período), sino que los multiplicó"19.

Ambas experiencias marcaron a fuego la vida de los ciudadanos. Fue un período de la historia donde la represión y el control se desarrollaron conjuntamente con la mejoría económica. Los estándares de vida alcanzados posibilitaron pensar que el socialismo propondría alternativas diferentes, donde la escasez daría paso a la abundancia y sería posible crear una sociedad más justa y libre, para convertirse en modelo a imitar, por los otros alemanes y las otras "democracias populares". Tal sensación se generó con la obtención de una soberanía plena.

Un factor de consenso: la soberanía de la RDA

En los estados contemporáneos, la soberanía constituye un elemento trascendental para sustentar la independencia política y la libertad de acción, no sólo interiormente, sino, sobre todo en política exterior. La situación particular de la RDA estuvo condicionada durante un período importante de tiempo por la falta de reconocimiento de su soberanía. Esta situación comenzó a cambiar con posterioridad a los sucesos de junio de 1953. Es decir, un hecho traumático produjo avances en las relaciones políticas de esta Alemania dividida, por lo cual hay que tener en cuenta que también la división actuó como un límite a su existencia y reconocimiento internacional.

La firma de Acuerdos de Amistad y Paz de 1954 con la URSS y la entrada de la RDA a formar parte del Comecon y del Pacto de Varsovia en 195520, significaron grandes hitos en la historia diplomática. El papel asignado por tales tratados, le permitió combinar enfoques negociadores y confrontacionistas con la República Federal de Alemania y con el mundo capitalista. Para sus intereses servía como mecanismo de reconocimiento de la Alemania que había logrado derrotar el pasado fascista y capitalista.

De igual modo la construcción del muro significó una demostración de soberanía. De hecho, el mundo se enteró de esta medida, protestando o adhiriendo. Aunque brutalmente, la RDA ejerció una forma de soberanía, evitando que sus ciudadanos tuvieran la libertad de marcharse. Pero en los años '60, el desconcierto por la creación del muro se fue atemperando y neutralizando sus críticas cuando la economía permitió que los trabajadores mejoraran sus condiciones sociales21.

Sin embargo, la soberanía de los estados alemanes era de trascendental importancia para su reconocimiento internacional. En 1967 Walter Ulbricht, expresó en Karlovy Vary, en medio de la Conferencia de los partidos comunistas y obreros europeos sobre los problemas de la seguridad en Europa: "La lucha por el reconocimiento de la República Democrática Alemana no es, pues, una cuestión jurídica o de prestigio; es un problema fundamental de la seguridad europea. El Gobierno germanooccidental concibe la negación de la existencia de la RDA como una confirmación de sus pretensiones revanchistas a la representación exclusiva, de su "derecho" a inmiscuirse en los asuntos internos de la RDA, incluida la agresión militar."22.

A fines de los '60, con la llegada de la socialdemocracia al gobierno en Alemania Occidental, los contactos entre ambos estados se hicieron posibles. El canciller Willy Brandt, propuso un acercamiento entre ambas Alemanias, cuyo resultado fue el Tratado entre la República Federal de Alemania y la República Democrática Alemana, firmado el 6 de noviembre de 1972. El artículo 6 sentenciaba: "La República Federal de Alemania y la República Democrática Alemana parten del principio básico de que la soberanía de cada uno de ambos Estados se limita al territorio de su respectivo Estado. Respetan la independencia y autonomía de cada uno de ambos Estados en sus asuntos interiores y exteriores."23.

La sanción de acuerdos y tratados fueron los instrumentos fundamentales para obtener la soberanía absoluta y el reconocimiento a nivel internacional. La entrada de la RDA en las Naciones Unidas, a partir de 1972, se interpretó como un triunfo de la política y de los logros del socialismo. Pero el interés de los dirigentes no se detuvo en estas instancias diplomáticas, avanzó más allá de esta línea de análisis. El reconocimiento internacional estaba íntimamente relacionado con la legitimidad que pudieran conseguir en el plano interior. Sin embargo interior/exterior eran dos instancias entrecruzadas. Y la consolidación de la legitimidad implicaba otorgar las condiciones materiales necesarias para una vida digna y los éxitos a escala internacional representados por adelantos técnicos, culturales o deportivos que llevaran el nombre de la RDA a lo más alto.

¿Cómo se construyó esa legitimidad? Los folletos de divulgación brindaron puntos apropiados para entenderla. La mayoría fueron editados desde mediados de los 70 y durante los años 80 por la editorial Panorama DDR, en una colección llamada A ciencia cierta. Estos libritos mostraban la forma de vida en la RDA, el papel que los sindicatos cumplían en la misma, el sistema educativo y la sociabilidad que la juventud podía desfrutar bajo el régimen. Otro tipo de información proporcionada versaba sobre la salud pública y el papel rector que el estado socialista tenía en cuanto a medicina, así como la función preventiva o profiláctica desarrollada por el sistema médico. En muchos casos, estos aportes se utilizaban como mecanismos para confrontar con la realidad de la otra Alemania, capitalista y "deshumanizada" en los diversos aspectos sociales.

Según estos folletos los ciudadanos de la RDA estaban integrados en diferentes instancias institucionales, además del Frente Nacional (formado por las diferentes fuerzas políticas "antifascistas"), existían organizaciones sindicales, juveniles, estudiantiles y cada una recibía la asistencia del estado, ya que todos eran parte del proyecto de construcción del socialismo. Desde la organización infantil (pioneros), pasando por las brigadas que cumplían funciones sociales importantes, hasta la educación y el trabajo diario en los campos, en las industrias o en los servicios se aplicaron mecanismos útiles en la tarea de sentirse partícipes del proceso de construcción social. Estos mecanismos sentaron las bases y los valores para conseguir la adhesión e involucrar a los diferentes colectivos en la labor social.

A menudo se interpretaba que estas actividades actuaban como las "fuerzas creadoras del pueblo", las cuales, según el discurso oficial, forjaban la conciencia social en la construcción del socialismo. Tales labores cotidianas contaban con un mecanismo desarrollado en todos los estados comunistas, impactando fuertemente en las etapas iniciales, denominado teoría de la emulación socialista. Cumplió un papel fundamental ya que el principio de la competencia entre los diferentes colectivos promovía formas más avanzadas de socialismo. Esto es, el principio de la competencia a escala social, supuestamente, eliminando todo posible egoísmo individualista, sirvió como basamento ideológico de la noción de socialismo sustentado aún después de la desaparición de Stalin.

Además de construir el socialismo bajo esta perspectiva, la ventaja que otorgaba seguir los lineamientos de la emulación podía convertirse en un lugar de privilegio24. Por ello emulación no solamente quería decir trabajo sino también deber político y superación y como en la URSS hubo un Stajanov, en la RDA aparecieron activistas que cumplieron el mismo papel25.

Al ser la fábrica el eje de las relaciones laborales, mucho de lo que sucedía debía pasar por ella. Con el paso del tiempo y a través de la integración, la situación social aunque mejorada, no dejaba de tener controles interiores, por ello un sociólogo pudo reflexionar al respecto de la siguiente manera: "En la RDA las relaciones sociales fueron mediadas a través de la primacía de las empresas, de las fábricas. Se hizo mucho para reforzar la cohesión de los colectivos de trabajo, de las brigadas. Las empresas disponían de recursos económicos para efectuar este trabajo de relaciones. Fue un medio de control social, de embrigadamiento. La cara visible de esto fueron los cuidados paternalistas que ayudaban a los individuos a encontrarse, pero al mismo tiempo este sistema permitía a la Stasi, servicio estatal de seguridad, infiltrarse en todas partes26".

Otro mecanismo de consenso se desarrolló con la posibilidad de que los trabajadores, los estudiantes o la juventud pudieran realizar turismo y vacaciones, dentro de la RDA. En el mejor de los casos, aquellos destacados en alguna actividad, contaron con el privilegio de ir de vacaciones a la URSS, Polonia, Checoslovaquia u otros países del bloque27, para contar y transmitir sus experiencias y ponerse en contacto con otros "buenos" comunistas que habían realizado un servicio a la patria de manera adecuada. Algunos podían disponer de los elementos necesarios para dedicarse a labores culturales: literarias, corales, pictóricas, teatrales28, etc. Pues, todo esto era posible porque las jornadas laborales se fueron acortando de manera importante, si en los 50 se trabajaban más de 50 horas, en los 70 había grupos que cumplían entre 40 y 42 horas semanales29. Por ello, el socialismo, con todas sus redes sociales constituía el mejor sistema social y político, hacía realidad para todos los ciudadanos, lo que en occidente sólo podían disponer los sectores más ricos de la población.

La política social orientada a las mujeres trabajadoras también debe tenerse en cuenta como un mecanismo de consenso muy desarrollado en la RDA. La cobertura fue muy amplia, variando con las décadas, pero asegurando las posibilidades de su realización profesional, técnica o cultural.

En los años 60 "el 70% de las mujeres entre los 16 y 60 años de edad trabaja en la producción... No extraña... el empeño de la sociedad y del estado socialista para rodear a la mujer de garantías reales, ni el respeto por su esfuerzo, el cuidado por su calificación técnica, y la comprensión de las dificultades resultantes de su doble función de trabajadora y de madre." ... En los 90 "estaba empleada el 91% de la población femenina y la mayoría tenía hijos. Como el sistema socialista proveía de guarderías y jardines de infancia en cada pueblo, industria o cooperativa agrícola, las mujeres podían combinar el trabajo con la maternidad. La mayoría ganaba lo suficiente como para mantenerse, por lo tanto disfrutaba del estatus de proveedora para la familia, en igualdad con sus maridos"30".

Además de las posibilidades del trabajo en fábrica, en el campo o en otras labores manuales, las mujeres tenían garantizada la participación en puestos de responsabilidad gerencial y de dirección, y la representación política en las diversas esferas del Estado, sea municipal, regional o nacional. Así lo reconoce el Dr. Bauer, quien en los años '70 sostenía en su obra sobre la mujer en los regímenes socialistas lo siguiente: "En la República Democrática Alemana, 53.370 mujeres son diputados electos a las diversas representaciones populares, 1.172 son burgomaestres. Como en la URSS, un tercio de los jueces son mujeres. 21.000 mujeres son jurados de tribunales. 103.353 son miembros elegidos de los comités del Frente Nacional. Un tercio de los directores de fábrica y de los dirigentes técnicos y económicos son mujeres31".

Señala asimismo las mejoras que la legislación y el ordenamiento social propiciaba, para que las mujeres participaran en todos los niveles de manera más amplia. Entre las garantías que debía establecer, se pensaba en la reducción de las tareas domésticas y en los adelantos técnicos que ofrecían las empresas con el objeto de reducir este trabajo considerado tedioso e improductivo. Mas la obra sólo podía triunfar si la colaboración para superar este atavismo involucraba también a los hombres, hecho remarcado por los folletos de divulgación32.

Pero, sin lugar a dudas, quien jugó un rol de primer nivel a la hora de conseguir la adhesión de los ciudadanos fue el deporte, debido sobre todo a los éxitos en las espartaquíadas y en los juegos olímpicos. Desde la época de la fundación de la RDA, comenzó una política deportiva, establecida en la misma constitución como un derecho para todos los ciudadanos.

Además de la importancia que el deporte tenía para el adiestramiento fabril, servía para desarrollar la fortaleza física33 de la población, así como un factor fundamental de salud, ya que su práctica serviría para reducir los problemas de gordura y el consumo de alcohol y tabaco34.

La fama conseguida por el deporte de la RDA, se debió a los triunfos en competencias internacionales, particularmente en Innsbruck y Montreal en 1976, donde las medallas superaron las 100 y los récords mundiales los 39 en natación, atletismo ligero, tiro al blanco y pesas35. La organización de los deportes competitivos tuvo un gran desarrollo, no sólo en infraestructura, sino también en la formación de instructores y funcionarios36.

Por estos logros y triunfos hubo sospechas desde los años 70, aunque algunas de ellas recién fueron aclaradas con la desaparición de la RDA. En cuanto a los éxitos deportivos "¿Que cómo se hace? No, señor, lo de las hormonas masculinas a las nadadoras es pura mentira de la propaganda enemiga"37. En la autoproclamación de nación del deporte, la práctica no sólo fue en competencias internacionales, sino también nacionales; de tal manera los atletas podían recibir la "Insignia Deportiva de la RDA", diferenciada en oro, plata y bronce38. Otro mecanismo de emulación en el socialismo. Mas el deporte tuvo otra significación: "Desde 1972, la RDA participa en los juegos con todos los derechos soberanos39".

Focos de protesta, desobediencia, disidencia y oposición, logros, exilios...

Los mismos acontecimientos de junio de 1953 generaron reacciones de dirigentes, militantes y especialistas del partido, así como de las otras fuerzas del Frente, solicitando el fin de las políticas de ajuste hacia los sectores populares. Muchos consideraron que el elemento causante del levantamiento fue la continuación de la práctica stalinista, siendo necesaria modificarla, reducir la presión sobre los colectivos laborales y democratizar, para que las representaciones sociales fueran más flexibles. En esta línea se encontraba el nuevo revisionismo, que tuvo adeptos en la RDA.

La represión produjo una sensación de malestar en una parte de la intelectualidad. Si bien luego muchos rechazaron la línea seguida en junio y a lo largo de los '50, otros aceptaron la imposición del SED. Wolfgang Harich, decidió criticar sin irse del país. Algunos intelectuales reconocidos debieron marcharse e instalarse en la RFA40, a fines de la década.

Durante los '60 el Dr. en física Robert Havemann criticó al socialismo de la RDA, con el interés de mejorarlo. De la noche a la mañana se convirtió en disidente, le quitaron el derecho a ejercer la docencia y lo vigilaron. Aunque crítico del stalinismo, como señala Patula, su inspiración de una sociedad libre y democrática vino fortalecida con la experiencia de la Primavera de Praga. El "socialismo con rostro humano", le mostró la posibilidad de construir un "comunismo en libertad".

Aunque me centraré en su propuesta, existieron otros intelectuales disidentes en esos años y la suerte corrida fue parecida. Entre ellos, resaltaron dos figuras, el filósofo Rudoph Bahro41 y el cantautor Wolf Biermann, ambos fueron expulsados, sin abandonar su lucha por una sociedad socialista. Luego, en los '90, Bahro formó parte de los verdes. Sus críticas señalaban la falta de libertad y un modelo de socialismo centrado en el Estado como dueño de los medios de producción, coartando la participación democrática de los ciudadanos.

La represión de la Primavera de Praga, donde el SED se destacó por su oposición, mostró una realidad terrible para las fuerzas que querían construir un socialismo democrático. La certeza de la oposición a partir de ese momento -reforzada durante los años 70- fue que los partidos comunistas del bloque eran incapaces de comandar el cambio revolucionario. Por el contrario impulsaban la "normalización" en todas las sociedades soviéticas, abandonando la concepción de agentes de la transformación. A mediados de los '70, la reivindicación de los derechos humanos tras la Conferencia de Helsinki, generó la aparición de pequeños movimientos que reclamaron el reconocimiento de estos derechos. Incluso el empeoramiento de las condiciones ambientales, por el uso indiscriminado de combustibles de baja calidad, afectaron el sistema ecológico. Lo cual produjo reclamos para proteger el medio ambiente. Ambos movimientos contaron con el apoyo de la Iglesia evangélica42".

Los manuales de historia de Europa oriental, sólo relevan la oposición de los 80, sobre las demandas de libertades individuales y derechos humanos. Aquella se encausó finalmente en movimientos que desencadenaron la caída del Muro y el fin del comunismo. Sin embargo hay que remarcar que éstas fueron las últimas protestas y confrontaciones, no las únicas y de lo que se trata es de historizar estas diversas manifestaciones. Por lo cual quiero retomar el planteo de Havemann, quien quiso transformar el régimen político y social de la RDA manteniendo los preceptos y la cosmovisión del socialismo marxista, que lo acompañaron toda su vida.

Individualizar en él la resistencia no significa negar otros procesos, sólo acotarlo a un caso particular de protesta contra un "régimen-estado policíaco". Lo fundamental, a mi entender, es periodizar las formas en que se expresó la oposición y verla como un proceso de largo alcance. ésta se desarrolló en confrontación con los diversos mecanismos que el poder del partido y de la policía política utilizaba. Mas en los basamentos filosófico-políticos, en las lecturas de los clásicos y en la observación de los procesos de democratización que se llevaban a cabo en otros estados del bloque, creció la convicción de Havemann en el triunfo del comunismo sobre el capitalismo, aún sobre las formas stalinistas de organización. Una muestra del respeto hacia la idea del socialismo, se puede apreciar en el siguiente pasaje, cuando realizó una apreciación sobre el papel que el comunismo soviético jugó en el proceso de liberación de la dominación nazi: "Mientras Hitler tuvo perspectivas de éxito en su ataque a la Unión Soviética, las potencias capitalistas occidentales le dejaron hacer, prácticamente sin oponerle resistencia. Pero cuando su derrota se hizo patente y el ejército soviético comenzó su imparable avance hacia el oeste, decidieron la invasión en Normandía. ... la guerra no sólo no había debilitado al comunismo, sino que lo había fortalecido y le había ayudado a extenderse por una parte considerable del mundo43".

Las derrotas, como la de Praga, provocaron una "subcultura de cariz decididamente apolítico"44. Sin embargo defendió el socialismo y a compañeros y colegas perseguidos, enviando cartas al secretario del partido y polemizando por la construcción de una sociedad más democrática.

Las palabras utilizadas, la búsqueda de acuerdos con determinados dirigentes y el interés por encontrar mecanismos que sirvieran a la democratización social, no implicó renunciar a la crítica mostrando claridad en los momentos necesarios, en ayuda de los camaradas: "... los compañeros del SED temen que nos veamos arrastrados por el revisionismo, el socialdemocratismo o el igualitarismo, y que el socialismo peligre. Pues bien, quiero aclararles algo: el cierre de fronteras, la censura y las limitaciones impuestas a la lectura, y en general, todas las infamantes muletas de apoyo con las que se pretende ayudar a los ciudadanos, no tienen nada, absolutamente nada que ver con el socialismo45".

La crítica más terrible, para un régimen que se mostró independiente, fue marcarle los defectos: que la RDA construyó su imagen en contraposición con la RFA, queriendo ser la única heredera de la tradición alemana. Las palabras de Havemann, duras pero certeras, señalan esta dependencia de Alemania occidental: "Superarles sin imitarles, así reza uno de los slogans más arraigados y desprovistos de la lógica política de la DDR". Pero hay un párrafo más contundente y seguramente muy doloroso para el autor:

"Aquí se está llevando a cabo una política que tiene como objetivo imitar al Oeste. Lo que la DDR representa no es el socialismo sino un sistema monopolista de Estado altamente perfeccionado... Fundamentalmente se aspira a los mismos objetivos económicos que en Occidente46".

Para Havemann una auténtica sociedad socialista, debería tener libertad de expresión e información, la libertad de escoger el trabajo y la residencia y la posibilidad de abandonar el país. Proponía no dejarse engañar por determinadas palabras, no sólo a los gobernados sino también a los gobernantes, que fueran concientes de las acciones políticas y sus expresiones suenan exentas de revancha47.

Una mala pasada para este socialismo, le jugó el uso del lenguaje manipulado por el partido. El mismo mostraba los aspectos positivos y las bondades de vivir bajo un régimen de tipo soviético48. La idealización de la vida, una sociedad casi sin conflictos, o por lo menos sin lucha de clases -porque la burguesía había sido derrotada con la guerra-, eran los rasgos que se resaltaban. A lo sumo el conflicto era con el mundo exterior, porque el interés del imperialismo era derrotar el socialismo alemán. Y algunas de estas representaciones fueron apropiadas por los ciudadanos. Los problemas interiores, que se referían a la vida cotidiana, se mencionaban al pasar, porque el partido con la ideología marxista leninista los iba a resolver.

No existía diferencia entre el gobierno y los ciudadanos, por tanto éstos al ser gobierno alcanzarían las soluciones. La "fuerza creadora del pueblo", encontraría las respuestas apropiadas. Aunque no reflejaba lo que pasaba por la cabeza de la gente, que vivía condiciones sociales dolorosas, que sufría vigilancia y represiones, sentía en muchos casos el poder de la censura. Buscaba expresarse en áreas donde predominaran espacios de libertad, como las manifestaciones artísticas, los deportes, la música, etc. La manipulación de los conceptos por el SED y la política de bastardear los contenidos detrás de un lenguaje inclusivo, mostraba los rasgos esquizoides del poder.

Para desenmascararlos, una forma corrosiva de protesta fue el humor: NIÑO RFA: Yo tengo una manzana y tú no tienes una manzana... NIÑO RDA: Y yo tengo socialismo y tú no tienes socialismo... NIÑO RFA: Pero yo algún día voy a tener socialismo... NIÑO RDA: Entonces no vas a tener manzana...49

Hubo que esperar hasta la caída del Muro para que el socialismo autoproclamado humanista, se desenmascarara y mostrara el rostro que lo había caracterizado, cuando los manifestantes movilizados en noviembre, asaltaron el punto neurálgico del poder: la sede de la policía política.

A pesar del cambio en los '90 y de la contundencia de los errores cometidos en nombre del socialismo democrático, antiguos dirigentes, revisando el final de los '80, podían sostener aún ideas tales como las siguientes: "Los síntomas de la crisis eran los siguientes: una ralentización en las actividades de los camaradas, un alza del número de procesos disciplinarios y... exclusiones del partido. Una investigación provisional da cuenta de 20.977 procesos en 1984 y 22.998 en 1988... El papel preponderante de las organizaciones del partido en las empresas y las instituciones fue debilitándose. Más aún, las fuerzas revisionistas y contrarrevolucionarias en el seno del SED tomaron la dirección ideológica del partido. La pérdida del papel preponderante de las fuerzas marxistas-leninistas en el seno del SED significó el fin de la RDA50".

De todas formas, resulta interesante destacar que el autor, al buscar las bases de la democracia51 en la RDA, describe que ciertas instituciones sociales, fueron perdiendo peso en la toma de decisiones y quienes lo hacían se liberaron del control de dichas instituciones. Luego del gobierno Ulbricht, hacia octubre de 1972 el Consejo de Estado perdía su derecho de control sobre el Consejo de Ministros, lo que también implicaba la limitación del control por la diputación popular. Y la transformación de empresas complementarias (privadas y cooperativas industriales de producción artesanal) en propiedad del pueblo, produjo una reacción contraria al control de los entes estatales, como también limitar la autonomía de las cooperativas agrícolas, fortaleciendo el poder estatal y del partido en detrimento del conjunto de organismos que tenían expresión en la toma de decisiones52.

Para finalizar, la recuperación de cierto pasado a través de esa moda denominada "ostalgie", puede significar que los pasados, a veces no lo son definitivamente, quedando algo como positivo, contraviniendo las sentencias lanzadas por François Furet, acerca de que el comunismo, como ilusión que había sido, no dejaba nada a la posteridad53".

Notas
1 Compendio de la historia del movimiento obrero alemán. (S/D: 159)
2 Entre otros BIAGINI y GUIDA (1996). MARTIN DE LA GUARDIA y PéREZ SáNCHEZ (1995). En no más de 20 páginas ambos libros repasan 40 años de historia, sin dar cuenta de los procesos de protesta interior y la formación de líneas comunistas que pretendieron un "comunismo en libertad". Por ello, la oposición recién apareció en los años 80, cuando la crisis económica era visible, tenía componentes democráticos occidentales, que surgieron luego de la firma del Tratado de Helsinki en 1975, es decir la que buscaba defender los derechos humanos de los ciudadanos este alemanes. Se releva en 1978 un manifiesto de los disidentes, basados en los principios del eurocomunismo, elaborado, se sospechó, por un tal "Hermann von Berg". También BENZ, W. - GRAML, H. (1986).
3 A manera de ejemplo, se pueden consultar PATULA (1993). HAVEMANN (1979) y (1980).
4 En una ponencia anterior, SGRAZZUTTI, Jorge "El tiempo libre como problema en la construcción del socialismo" en IV Jornadas de Historia Moderna y Contemporánea CD-Rom Ponencias, Resistencia, setiembre de 2004, ISBN 950-656-079-X, busqué reflexionar desde esta perspectiva.
5 DíAZ-PLAJA (1981: 159). Este viajero marca los siguientes datos a la hora de visualizar el reconocimiento que hizo la URSS "... sus amigos rusos se habían llevado cerca de 1.450 fábricas, que fueron desmontadas y enviadas a Rusia, antes de empezar a considerarles camaradas.".
6 "En el bloque del "socialismo real", la RDA es una especie de coloso con pie de arcilla: un coloso por su potencia económica, y su estabilidad política; con pies de arcilla, por su posición de puesto avanzado del mundo "socialista" hasta el corazón de una de las fortalezas del capitalismo occidental, permeable a todas las propagandas del "enemigo de clase", que, según la expresión de un periodista soviético, viene cada noche a destilar su visión del mundo y sus informaciones "al amor de la lumbre" de cada hogar germano-oriental, sin obstáculo de idioma ni de interferencia." NOIRAUD, Emile "RDA: Honecker tiene miedo a Polonia", en Solidarnosc (1982: 257).
7 HEITZER (1981: 134-257). En el cuarto período fue apareciendo paulatinamente la racionalización y automatización de las empresas por el desarrollo de la microelectrónica, con sus respectivos inconvenientes. Ver "En aras del Pueblo. Preguntas y respuestas sobre la política social de la RDA. Empleo y prestaciones sociales II", en (http://leninismo.org/en_aras_pueblo2.htm : 3).
8 HEITZER (1981: 119). La periodización que establece el autor, es la oficial y clasifica las etapas de la siguiente manera: 1. La revolución democrático-antifascista (1945-1949), 2. El establecimiento de las bases del socialismo (1949-1961), 3. El camino hacia la sociedad socialista avanzada (1961-1970) y 4. La edificación ulterior de la sociedad socialista avanzada (1971-1978). Hablando de los elementos previos para la aparición de estas etapas el autor sostiene: "Los progresos económicos avanzados permitieron mejorar aún más las condiciones de vida de la población. En 1957, se redujo el tiempo a 45 horas semanales, conservando el salario, en la industria socialista y en el servicio de comunicaciones y transportes. En 1958 fue posible suprimir el racionamiento restante de los productos alimenticios. Se facilitó un mayor número de automóviles, motocicletas, televisores, radios, refrigeradores, lavadoras y otros valiosos bienes industriales de consumo de mejor calidad. En julio de 1958 se comenzó a producir en serie el automóvil "Trabant". Las vacaciones anuales a orillas del Báltico o en las montañas de la RDA ya se sobrentendían para muchos ciudadanos de la RDA. En esta época empezaron los viajes a otros países socialistas. Pero, algunos proyectos del plan, orientados a elevar el nivel de vida de los trabajadores, resultaron demasiado ambiciosos: no se pudieron realizar en el plazo previsto".
9 No obstante algunos plantearon la capacidad de la mano de obra y el socialismo alemán para asimilar la revolución tecnológica: "La RDA puede enorgullecerse de una proeza industrial única en el mundo: en tres años, una empresa que fabricaba aparatos de televisión efectuó una conversión sobre la construcción de ordenadores después de haber dado la formación apropiada a la totalidad de sus 3.800 trabajadores. Recientemente ha puesto en marcha un complejo químico automatizado, Leuna II, que con un efectivo de 2.000 personas, iguala la capacidad de producción de Leuna I, que cuenta con 50.000. Esas proezas... dan testimonio de una indiscutible aptitud para pisarle los talones a la revolución tecnológica.", DRU, Jean "El estado, el plan y la república de los consejos", en AAVV Sociología (1973: 69).
10 Estas reformas tenían intenciones de consolidar el poder estatal más que de mejorar las condiciones de vida.
11 Para un análisis desde la perspectiva de la resistencia civil no violenta puede consultarse "El levantamiento en Alemania del Este. 1953", en http://www.noviolencia.org/experiencias/europaeste.htm. Es un trabajo muy interesante porque analiza los diversos grupos e instituciones que participaron. Una página trotskista evalúa el resultado represivo de la siguiente manera: "Por la noche del día 18 fue cuando los 300.000 soldados rusos estacionados en el país se movieron con sus tanques contra los trabajadores. éstos se les enfrentaron con piedras y cócteles molotov. Se decretó la Ley Marcial. La región minera de Ertsgebergte entró en huelga y en la insurrección el día 19, pero fue aplastada por las tropas rusas. Aunque los datos varían, murieron 260 trabajadores a manos rusas, seis fueron ejecutados, cuatro condenados a cadena perpetua y 1300 más llevados a juicio", en CARRIQUE ángel, op. cit., (http://www.marxismo.org/alps/ALPS16_8.htm : 2).
12 A modo de ejemplo resulta ilustrativo la forma en que el SED se quitó de encima las responsabilidades que le correspondieron para que la situación social se hiciera tan intolerable, hasta llegar a producirse un levantamiento popular: "... los gobernantes de Bonn, en unión con los imperialistas de los Estados Unidos,... organizaron el "putch" fascista del 17 de junio de 1953 que fracasó vergonzosamente... El grupo revisionista Zaisser-Herrnstadt hizo causa común con la política del adversario de clase.", Compendio (S/D: 169). La relectura trotskista plantea: "La reacción del SED, que admitía en su periódico Neues Deustchland del día 17 que había razones para el descontento y que la huelga no era instigada por provocadores, fue calumniar a los huelguistas como fascistas, agentes norteamericanos y lúmpenes.", CARRIQUE (http://www.marxismo.org/alps/ALPS16_8.htm :3).
13 HELLER y FEHER (1992: 135-139). Lo más probable es que tales dirigentes estuvieran más cerca de Malenkov.
14 Gert Robel sostiene que tras la caída de Beria la RDA tuvo un respiro financiero suprimiendo la obligación de pagar reparaciones, el 22 de junio de 1953 y con la reducción de los gastos de ocupación; posteriormente Moscú brindó créditos para ser invertidos en la industria de bienes de consumo, en BENZ, W. y GRAML, H (1986: 372).
15 Compendio (S/D: 195).
16 CUZZANI-BAUER (1967). Los autores, visitantes argentinos, muestran un afiche en la página 54, donde una joven voluptuosa está desabrochándose el vestido. La frase citada aparece en la página 98. BAUER (1974: 122). El autor vuelve a expresar y actualizar esta problemática, de la siguiente manera: "El enemigo actúa muy hábilmente a ese nivel, tendiendo el anzuelo donde puede. No siempre lo hace en forma burda, como cuando se desnudaban prostitutas a lo largo de la frontera estatal, que separa los dos sectores de Berlín para incitar a los soldados del ejército popular de la República Democrática Alemana a que desertaran; ..."
17 La reproducción de un artículo publicado en el Sächsiche Zeitung (Dresden), el 6 de setiembre de 1961, muestra un castigo "ejemplar", con fines a la reeducación de una ciudadana engañada: "María Veneno pasará un año en la cárcel, fuera del alcance de las insinuaciones hostiles de la propaganda occidental, para que reflexione sobre su vergonzosa conducta y saque conclusiones sobre su porvenir". Comisión Internacional de Juristas (1962: 56).
18 Una de ellas, fue realizada por María Soledad Mansilla Clavel donde hay imágenes y relatos a lo largo del tiempo que el mismo duró.
19 Sugerentes resultan ser las palabras de este ciudadano, que expresa las dificultades para construir el socialismo, si la política seguida por el partido está orientada contra la población, a través de la vigilancia realizada por intermedio de la policía política, la Stasi. RATHENOW ( http://www.cccb.org/transcrip/urbanitats/estoest/21est_lutzroth.htm: 7).
20 BIAGINI y GUIDA (1995: 54).
21 La industria cultural norteamericana obtuvo grandes beneficios monetarios, financiando películas que hacían del espionaje detrás de la "cortina de acero", el eje de los argumentos.
22 Discurso de Walter ULBRICHT (1967: 68). Una tarea importante en la consecución de la soberanía la desempeñó el deporte: "El Comité Olímpico Nacional de la RDA fue reconocido, en 1968, con todos los derechos... Los éxitos en el deporte fueron prueba elocuente de las potencias del socialismo... contribuyeron al creciente prestigio internacional de la RDA y a consolidar la conciencia estatal socialista de sus ciudadanos.", HEITZER, (1981: 167).
23 Revista Oriente Europeo N° 88 (1972: 317).
24 En JUVENTUD (1977: 30), refiriéndose a la política salarial hacia los jóvenes, se sostiene: "Para él, como para cualquier otro trabajador, rige el principio socialista del rendimiento. Cuanto mejor se trabaje, tanto más ganará".
25 En el Compendio (S/D: 155) puede leerse que después de la aprobación del Plan Bienal por el XI Pleno del CC del Partido: "... los sectores más conscientes de la clase obrera emprendieron la lucha contra la propaganda enemiga y contra los conceptos oportunistas dentro de sus filas, y para forjar... una nueva moral del trabajo que correspondiese al nuevo papel de la clase obrera y a una alta productividad... se manifestó claramente en la hazaña del primer activista Adolf Hennecke y en el crecimiento cada vez más rápido del movimiento de activistas... Los sindicatos, dirigidos por el PSUA, actuaron como organizadores de los movimientos de emulación y de los activistas.".
26 ZOLL (1994: 12).
27 En La juventud (1982: 48), puede leerse lo siguiente: "Grupos de 'Jugendtourist' van también a Cuba, a Mongolia, Yugoslavia, Mozambique, Argelia, a la Corea socialista y a Viet Nam y a una serie de países capitalistas. Sin embargo, el número de estos viajes es limitado, entre otras cosas porque se organizan... sobre la base del intercambio recíproco de turistas.".
28 BAUER (1973: 188) el autor narra la importancia de estas actividades: "Los festivales fabriles buscan siempre un objetivo inmediato: producir alegría del mismo modo, como lo hacen también el teatro, el concierto y el cine, pero por un medio particular: el compañerismo, la sociabilidad, siempre impregnados por una aporte cultural y artístico. Esto no es siempre tarea fácil. Se necesita tanta comprensión humana y artística como capacidad organizativa e intuición social. Se trata de una tarea muy noble: estimular las fuerzas creativas de los obreros y dirigirlos hacia la utilidad para la sociedad y el progreso del prójimo. Es el método más adecuado para superar el egoísmo heredado de sociedades fenecidas y acercar los hombres a su nuevo papel en la sociedad socialista... su función es a la vez educativa y política".
29 Así (1984: 249-254). El aporte de los sindicatos a las vacaciones de los trabajadores, representaban un 35% de sus egresos, con lo cual los beneficiarios aportaban un 30% del costo total gracias a los subsidios recibidos, lo que implicaba entre otras cosas pagar un tercio de las tarifas ferroviarias. La juventud (1982: 39-49). ¿Qué...? (1986: 21-27). JUVENTUD. (1977: 46-53). Estudiante (1983: 53-56).
30 CUZZANI - BAUER (1967: 73). Christa Witchterich, Wide: "Las mujeres de Alemania del Este, ¿perdedoras con la reunificación?", disponible en internet. Para llevar adelante esta política de empleo femenino el Estado garantizaba el cuidado de los niños: "En la República Democrática Alemana, ya en 1967, había 10.364 jardines de infantes y hogares semanales, con plazas para niños; debiéndose agregar a ese número 2.774 establecimientos temporales en las aldeas, para la época de la cosecha, con 51.057 plazas. A la vez, había 500 casas cunas con 158.255 plazas, o sea, el 22% de todos los niños hasta los 3 años de edad" (...) "... la necesidad de aliviar a la madre y darle la posibilidad de trabajar en la producción, no es el único motivo para la instalación de casas-cuna y jardines de infantes. El otro motivo, quizás el más esencial, es el deseo de estimular la sociabilidad desde el comienzo mismo.", BAUER (1974: 52-53).
31 BAUER (1974: 47).
32 BAUER (1974: 54-56) "... el problema de los hijos es sólo uno de los que exigen ser solucionados para que la mujer pueda desempeñar un papel activo en la producción y en la sociedad... Otro problema importante es el trabajo doméstico... la cifra promedio por mujer (ronda) unas 14 horas por semana (...) he visto, en la República Democrática Alemana, los lavadores instalados en las fábricas. Las máquinas de lavar se entregan al personal, por turno, gratuitamente o en alquiler por una suma irrisoria".
33 También como instrucción militar. "En agosto de 1979, la administración Honecker suscribió un acuerdo con los partidos chilenos en el exilio, a fin de que la Sociedad para el Deporte y la Técnica de la RDA (Gesellschaft f ür sport und technik, GST) ofreciera un programa especial de gimnasia para militantes chilenos". Información extraída en URL: http://docs.tercera.cl/especiales/2001/verdeolivo/capitulo04/camaradas01.htm 34 La juventud (1982: 50-51).
35 Juventud. (1977: 53). Así...(1984: 260) cifra en más de 400 el total de medallas.
36 Así... (1984: 54).
37 DÍAZ-PLAJA (1981: 157). Steve KETTMANN comenta que: "en los Juegos de Montreal de 1976,... la nadadora americana Shirley Babashoff coment(ó) con el entrenador alemán sobre las profundas voces de sus nadadoras. La famosa respuesta del entrenador fue, 'hemos venido a nadar, no a cantar'". Muchos de los deportistas realizaron juicio al estado por el uso de anabólicos sin su conocimiento y por los trastornos físicos y mentales que les produjo. Aunque el tema del dopaje excedió las fronteras ideológicas.
38 Así... (1984: 255-257).
39 Así... (1984: 260).
40 PATULA (1993: 162) "... el exilio representaba una forma de protesta contra la realidad existente en su país natal. A principios de los años sesenta, tal decisión fue la que tomaron el filósofo E. Bloch, el historiador de la literatura H. Mayer y el crítico literario A. Kantorowicz, todos destacados intelectuales marxistas".
41 Con el libro La alternativa, Bahro presentó, a finales de los años '70, las críticas centrales al "socialismo real".
42 PATULA (1993: 386-387) señala que a partir de 1979 aparecieron movimientos pacifistas, contra las armas nucleares, la organización correspondió a la Iglesia evangélica, que ya se expresaba a favor de los objetores de conciencia en los 60, durante los 80 articularon también reivindicaciones de derechos del hombre y defensa de la ecología. Por su parte Flora LEWIS (1990: 399) explica que en 1978 "la Iglesia (es) la única institución legalmente aceptada no controlada por el Partido Comunista... se convirtió también en el centro del movimiento de paz, no oficial, y de la protesta contra la creciente militarización de la sociedad alemana oriental".
43 HAVEMANN (1979: 66/67).
44 RATHENOW (http://www.cccb.org/transcrip/urbanitats/estoest/21est_lutzroth.htm : 3).
45 HAVEMANN (1979: 84).
46 HAVEMANN (1979: 186 y 136).
47 "Masas de trabajadores entusiasmados con el socialismo; el 99% identificados con el Partido y el gobierno; un pueblo unido y fraternal, compitiendo en la producción y fijándose objetivos cada vez más altos; todos formando un solo corazón que late por la gran causa del socialismo. Esta es la imagen, el realismo socialista, fiel a sus principios, sólo muestra los aspectos positivos de la DDR, lo que representa progreso y triunfo. Por lo visto se espera que la imagen de la victoria convierta en realidad la victoria y que disminuya el influjo desmoralizador de lo negativo, crítico, titubeante. Pero es evidente que este falso realismo, azucarado y color de rosa, consigue lo contrario de lo que pretende. Hace falta estar increíblemente ciego para no verlo." HAVEMANN (1979: 146).
48 Ürsula TAPIA analizando el lenguaje, señala la diferencia en el uso del idioma en las dos Alemanias, remarcando las características que éste tuvo en la región oriental: "el muro de Berlín es "un muro de protección antifachista"; el empleo oficial del término "socialista" debía sugerir la existencia de un orden libre y justo; frente al término "propiedad del pueblo" había de hecho un Estado propietario de todo y un pueblo desposeído; "la protección de los frutos del trabajo del pueblo" era una expresión que pretendía obtener la camaradería entre el pueblo de los trabajadores protegidos y los protectores gobernantes, cubriendo el abismo que había entre el trabajo real del pueblo y aquellos que se apropiaban, en nombre del Estado, de los frutos del trabajo del pueblo", ( http://www.umce.cl/~cipumce/cuadernos/facultad_de_historia/monografias_tematicas/cuaderno_32/literatura_reunificacion_alemana_presentacion.htm: 7).
49 VÁRNAGY (2003: 12).
50 HUAR (2001).
51 HUAR (2001). El concepto de democracia manejado por el autor difiere de la interpretación liberal, ya que se refiere al poder de control que pueden tener los organismos productivos en relación al control del aparato estatal y la toma de decisiones, implicando una democracia directa y asamblearia.
52 HUAR (2001: 6)
53 FURET (1992). El filme Good Bye Lenin, refleja esta moda.

Referencias bibliográficas y fuentes
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